Salvatore. Questa è la vita
Todos hemos escuchado alguna vez lo de en esta vida no hay blancos y negros: sino grises. Muchas verdades se nos dicen en forma de frases sencillas como esta pero cuánto cuesta asimilarlas, hacerlas verdaderas.
En esta peli se nos muestra que no hay una ley jurídica única y buena para aplicar en todos los casos. La ley está para cumplirla dice otra frase. Hay que humanizar las leyes, sino aún estaríamos en el ojo por ojo, diente por diente.
En la película nos cuentan cómo vive un niño siciliano de unos 10 años que ha perdido a sus padres y se ocupa de su hermana pequeña y su abuela. Solo, sin nadie más. Sus padres vivían de la agricultura y a pesca. Salvatore continúa el trabajo de sus padres. Trabaja cultivando un campo de tomates y pescando. Después va a vender el producto de su campo y su mar. No va a la escuela.
En la dirección de la escuela donde debería ir se preocupan por él: Salvatore debería llevar vida de niño y no de adulto. Sin embargo la película nos muestra una vez más que la realidad no es blanco o negro, es ambigua. El director de la escuela tiene dos opciones encarnadas por dos personajes: el maestro de la escuela y la asistenta social.
El maestro va a ver a Salvatore en su campo, en su barca. Lo va a ver de vez en cuando para ganarse su confianza. Observa lo que hace, lo bien que se las apaña y de tener el único mensaje de “Salvatore tienes que volver a la escuela” pasa a tener otra idea. Ve que es buen padre, buen nieto y buen trabajador, se sabe valer por si mismo, lo mismo que soñaba él (el maestro) de pequeño. La idea que tiene es la de darle las lecciones de matemáticas aplicadas al cálculo de un agricultor, las de geografía y ciencias naturales montados en la barca, le encarga deberes escritos…
La asistente social, por el contrario, cree que la única vía es la radical: manda llevar a la hermana, abuela y Salvatore a un centro del estado para que se ocupen de ellos.
La película nos muestra que la opción vencedora es la del maestro: Salvatore regresa a la escuela gracias al trabajo del maestro que sacrifica todo su tiempo para dar a Salvatore primero unas lecciones, después para hacerle de padre. Corre el riesgo de no separar los roles del educador, el amigo, el maestro. Pero finalmente consigue dar a Salvatore una familia, unos amigos y un futuro.
6 comentarios
gianny fabrizio pausini pinzon -
Diego Navarro Fernandez -
Tonificante -
te veo muy informado. Yo vi esta peli en un cine de Italia, supongo que de un modo u otro la conseguirás. Me encantaría que todo el mundo la pudiera ver. Ésta y todas las que recomiendo en la sección "Películas"
Pedro Eduardo -
Ojalá y esta pelicula llegue a los cines Chilenos y de modo contrario habrá q esperar el DVD bye.
P.D la canción del film es interpretada por Laura Pausini "como el sol inesperado" incluida en su ultimo disco Yo canto / Io canto
Tonificante -
mICrO -
Saludos