El precio de la libertad

la de romper con una vida diseñada para ser productivo en una ciudad que le engullía su tiempo y su espíritu.
Tomó la valiente decisión de dejar un empleo seguro y volver sus orígenes. En su caso, venía de las montañas pirenaicas.
De allí venía su familia y allí quería encaminar la propia.
Pero en ese maravilloso paisaje de alta montaña, vigorosos árboles y suaves valles, no encajó su matrimonio.
Su felicidad individual se imponía a la colectiva y ésta se rescabrajó.
Meses después se recuperaría con un inesperado amor de la misma naturaleza que su interior liberalizado.
Y es que en el amor, como decía Antoine Saint-Exupéry, no se trata de mirarse a los ojos sino en mirar en la misma dirección.
Ahora, con su nueva pareja, trabajaban juntos en un nuevo proyecto relacionado con el campo, la agricultura, en el desarrollo de la zona, de la tierra que ellos aman y de la que quieren un futuro más allá de la especulación inmobiliaria.
4 comentarios
eloi -
http://elblocdeleloi.blogspot.com/2007/06/preparant-la-primera-trobada-de.html
Sergio -
Tonificante -
Sergio -