María (2)
María tenía 25 años, había terminado sus estudios y se empezaba a abrir camino en el mundo laboral. Estaba soltera, sin compromiso. Charlaba animádamente con Nieves y Júlia. Nieves compartía piso con su novio y Júlia se acababa de separar y era, de nuevo, “libre”. Discutían sobre las ventajas de cada una de sus situaciones: soltería “por defecto”, vida en pareja, soltería reconquistada...
Maria veía el discurso de Júlia un poco afectado por la dura experiencia de su separación. Cuando su amiga enumeraba las ventajas de “su soltería” como: independencia, libertad, mayor capacidad económica, recobrar el propio espacio, tomar las propias decisiones, estabilidad... veía la soltería de su amiga muy distinta a la suya propia. Las dos eran solteras, sí, pero María no se sentía igual. Ella creía en el amor que no liga, que no quita independencia ni libertad; en la solidaridad, el compartir, el bien común, el respeto, el consensuar las decisiones, luchar por la unidad y la estabilidad dentro de la pareja...
Nieves tampoco estaba muy de acuerdo con Júlia pero la comprendia. Ahora estaba bien con su novio pero sus relaciones anteriores habían sido breves, temporales y frágiles. “El amor se puede ir tal y como vino”. “Vivimos cada instante con intensidad, estamos bien pero quién sabe lo que pasará dentro de unos años, no le puedo asegurar que le ame para siempre”. “Estoy con él porqué me da la seguridad de saberme querida y siento que soy importante para alguien”.
Las ideas de María no encajaba con las de Nieves. En su corazón se había encargado de tejer un sólido tejido emocional tan fuerte que se veía capaz de construir una relación más firme y duradera, basada en el AMOR de sus sueños. Cuando llegase el momento sabía que encontraría a alguien que le hiciese sentir que el amor que compartían era digno del que un día, cuando era pequeña, sintió que le llenaba al tiempo que le exigía estar a la altura.
¿Qué opináis? Podéis seguir ésta historia aquí o en vuestro blog (avisándolo, claro). Como siempre podéis mandarme un correo donde os digo en el inferior de la página, participar comentando...
Maria veía el discurso de Júlia un poco afectado por la dura experiencia de su separación. Cuando su amiga enumeraba las ventajas de “su soltería” como: independencia, libertad, mayor capacidad económica, recobrar el propio espacio, tomar las propias decisiones, estabilidad... veía la soltería de su amiga muy distinta a la suya propia. Las dos eran solteras, sí, pero María no se sentía igual. Ella creía en el amor que no liga, que no quita independencia ni libertad; en la solidaridad, el compartir, el bien común, el respeto, el consensuar las decisiones, luchar por la unidad y la estabilidad dentro de la pareja...
Nieves tampoco estaba muy de acuerdo con Júlia pero la comprendia. Ahora estaba bien con su novio pero sus relaciones anteriores habían sido breves, temporales y frágiles. “El amor se puede ir tal y como vino”. “Vivimos cada instante con intensidad, estamos bien pero quién sabe lo que pasará dentro de unos años, no le puedo asegurar que le ame para siempre”. “Estoy con él porqué me da la seguridad de saberme querida y siento que soy importante para alguien”.
Las ideas de María no encajaba con las de Nieves. En su corazón se había encargado de tejer un sólido tejido emocional tan fuerte que se veía capaz de construir una relación más firme y duradera, basada en el AMOR de sus sueños. Cuando llegase el momento sabía que encontraría a alguien que le hiciese sentir que el amor que compartían era digno del que un día, cuando era pequeña, sintió que le llenaba al tiempo que le exigía estar a la altura.
¿Qué opináis? Podéis seguir ésta historia aquí o en vuestro blog (avisándolo, claro). Como siempre podéis mandarme un correo donde os digo en el inferior de la página, participar comentando...
8 comentarios
tito -
Tonificante -
Marta -
Me conoces bastante bien, pero... Me ha parecido curioso que para tratar el tema del "amor", y sus distintas interpretaciones, hayas utilizado a tres mujeres (inventadas).
Acaso los hombres no tenéis alguna? O algunos, simplemente, se dedican a "esperar" o atacar, siempre que tienen ocasión?
Ellos, y tú como portavoz :), no tenéis esa intuición de amor, que pueda ser interpretada? O no existe para ellos una definición de amor?
Besitos
Tonificante -
Tanto Júlia, Nieves como María son personajes inventados o sea que lo que haya dicho son puras interpretaciones de las tres 'filosofías'que quería caricaturizar...
Marta -
Si no lees el comentario de la primera parte, te será más complicado encasillarme, o tal vez, no.
Espero antes tu respuesta, y luego te comento este post :)
Tonificante -
Ivich: por lo que me cuentas últimamente no te sabría encasillar, no... pero algo de Nieves sí que tienes aunque tb te planteas las ventajas de estar sola como Júlia... Te veo entre las dos.
Isis: a ti no te conozco ni de vista, claro... he entrado en tu blog alguna vez, a ver si tengo más tiempo, me gusta conocer un poco a la gente que me visita...
Isis -
bss!
Ivich -
Ahora mismo escogería un final feliz...es lo que tiene el amor, unos días sientes una euforia increible y otros días sientes un vacio con el que no puedes guerrear... Muchos besines :*