Rescata niñas.
Cada dia si ponemos la TV se empeñan en mostrarnos lo mal que va el mundo. Por si esto fuera poco, las noticias nacionales abundan en accidentes domésticos, de tráfico, en las escuelas...
Fijaros ahora en ésta historia. No por su crudeza, ya sabemos lo mal que lo pasan algunos en el mundo, sino porqué ésta señora hindú pone su empeño en mejorar y enderezar las vidas de muchas niñas de Nepal. No haré como en la TV donde sólo enseñan los desastres, yo os presento a una señora como testigo positivo de esa realidad. Al lado de la injusticia siempre hay alguien que vela por los que la sufren. La esperanza siempre está allí. Pues bien, ésta señora fundó la asociación Maiti Nepal para rescatar a niñas de la prostitución.
Anuradha, ese es su nombre, fue educada por sus padres igual que sus hermanos, cosa excepcional en un país que no equipara chicos y chicas. Es profesora y siempre ha luchado a favor de la educación de las niñas. Cuando en 1990 Nepal pasó de ser una monarquía a una democracia, se empezó a abordar el tráfico sexual, a tomar consciencia del problema.
Decidió formar grupos de periodistas, jueces, abogados y parlamentarios y enseñarles la realidad distrito a distrito, pueblo a pueblo.
Vieron que las niñas no iban al colegio. Sus padres las hacen trabajar al máximo mientras están con ellos puesto que cuando se casan se van con la familia del marido. En muchos pueblos los padres habían perdido contacto con sus hijas, no tenían noticias de ellas. No sospechaban que sus niñas habían sido raptadas, enviadas a Índia(Calcuta, Delhi) para el turismo sexual. Se imaginan que van a tejer alfombras. Los indios creen que por tener relaciones sexuales con una niña se van a curar de sus enfermedades, cuanto más joven mejor.
Las niñas viven en 5metros cuadrados, hay tres hileras de literas, donde trabajan. Estan ellas, los clientes y si hay hijos, los esconden debajo de la cama. Trabajan 16horas atendiendo entre 15 y 25 hombres diariamente. Les dan una comida al dia. Jamás acuden a un hospital. Los curanderos les practican el aborto y al cabo de unas horas vuelven al trabajo.
Gracias a ésta señora, muchas familias se ponen en contacto con sus hijas. Su labor hace que en Katmandú haya 500 niñas recuperadas y en todo Nepal 5000 en 30 centros. Es desagradable leer éste tipo de cosas pero el otro lado es ver que hay gente que mete los pies en el barro para salvar vidas que de otra forma a los 20 años como mucho ya habrían desaparecido en un rincón de la calle por sida, tuberculosis...
2 comentarios
Neri -
Te visitare a menudo de ahora en adelante.
Un saludo..
ivich -
Por mucho que sepampos las desgracias que suceden, creo que a veces necesitamos relegarlas a un segundo plano para poder seguir con nuestra vida de comodidades sin remordimientos. ¿Pero cual es la solucion? ¿Como ayudar? ¿como evitar? Cuando pienso que dejamos que sucedan ya tantas cosas desagradables (quiza menos, pero injustas de todos modos) en nuestro micro-entorno...
I.